viernes, 6 de junio de 2014

¡Esto es Dota!

Tras un largo tiempo de inactividad, vuelvo para actualizar un poco el blog. Espero que en todo este tiempo haya sido de utilidad para algunas personas.

El motivo de esta entrada no es otro que el de motivar. Recordemos que, a la fecha de la última entrada de este blog, las partidas clasificatorias aún no estaban implementadas, y muchos héroes han sufrido cambios. A estas alturas no voy a ponerme a enumerar los cambios uno por uno, básicamente porque ya todos los sabréis y no es una información útil. Desde que se implementaron las partidas clasificatorias, ha habido opiniones de todo tipo, tanto buenas, como malas. Vale, ha recibido más opiniones malas que buenas, es la verdad. Pero aquí está Tourette's Guy para aportar su granito de arena.

Voy a contar mi experiencia personal con las clasificatorias: son una jodida mierda. Así de claro. Gran parte de mis partidas clasificatorias han sido como jugar en la low priority queue, ese lugar infernal en el que Gabe Newell nos condena a jugar varias partidas para expiar nuestros pecados (es decir, troleos, flameos, insultos, fedeos intencionados, afk, etc). Pues algo así ha sido mi experiencia con esta modalidad de juego, aunque claro, también he tenido algunas partidas buenas. Pero por lo general, tengo mucha mejor experiencia de juego jugando partidas "normales". ¿La razón? No la sé. De hecho actualmente sólo juego clasificatorias cuando tengo algunos colegas disponibles con los que hacer equipo. 

Pero bueno, vamos a lo importante. ¿Cuántas veces uno se ha dado de bruces en un equipo en el que nuestros compañeros parecen no haber jugado Dota en la vida y no hacen más que hacer gilipolleces? ¿Cuántas veces habéis escrito "gg" cuando todavía no llevábais ni 15 minutos de partida? Es cierto que la mayoría de esas partidas serán una derrota segura, pero no son pocas las veces que he remontado una partida que parecía totalmente perdida. Y, ¿sabéis por qué? Porque muchas veces, cuando un equipo va en racha y está dominando, se vuelve arrogante, confiado, y comete errores. Tienen exceso de confianza, y ese exceso de confianza es lo que les hace tener más posibilidades de tener un mal movimiento que haga que la partida pueda dar un giro de 180º en una teamfight. No os rindáis cuando veáis que la partida está en vuestra contra. Organizáos, jugad defensivamente esperando al contraataque, y sobre todo, mucha comunicación con el equipo. Sé que, si jugáis solos, esto último es prácticamente imposible, pero hay que intentarlo. Si jugáis con amigos esto se vuelve más sencillo, no cabe duda, pero también es posible remontar partidas en las que se juega solo. Simplemente hay que tratar de dar aliento al equipo y trazar una estrategia defensiva (pensad en el fútbol ultradefensivo italiano, pero aplicado al Dota).Y sobre todo, no os separéis; permaneced juntos.

¡No os rindáis, motherfuckers!